Champions Challenge: la costumbre de dar vuelta los partidos

Lucas Vila, autor del quinto

Argentina derrotó a Polonia 5 a 1 en uno de los cruces de cuartos de final del Champions Challenge de Sudáfrica. Lucas Argento, Pedro Ibarra, Rodrigo Vila, Lucas Rossi y Lucas Vila convirtieron para la goleada del Seleccionado nacional. Una vez más, y a esta altura parece una cábala, los dirigidos por Pablo Lombi debieron remontar un resultado adverso para avanzar a semifinales.

Pese a la holgada chapa final, Polonia empezó ganando y no es la primera vez que rivales de menor ranking y peso colectivo le dificultan los minutos iniciales a Lombi y compañía. En la fase de grupos (Malasia, Canadá y Japón), todos los match se iniciaron en desventaja. Pedro Ibarra, máximo anotador albiceleste con 4 conquistas, justificó las levantadas en "La experiencia y madurez que muestra el equipo" y le dio importancia a "Confiar en mantener nuestro sistema de juego" para encontrar las chances que permitan dar vuelta los partidos. 

 El crecimiento del grupo se vislumbra en el juego, pero lo más rescatable es la tranquilidad que muestra el plantel al ir abajo en el marcador. Ya se vio en los Juegos Panamericanos ante el cuco canadiense que, en una de las pocas que tuvo, marcó y se fue ganador en ese primer tiempo y dejó a Argentina con el rótulo de dominador moral. Jorge Lombi, asistente técnico de Pablo, había explicado luego del oro panamericano la razón del cambio: "En mi época, cuando íbamos perdiendo con Canadá, nos nublábamos y salíamos a jugar a lo loco. La mística de estos pibes se explica en la calma". 

Calma y destreza tuvo Lucas Argento para cruzar ese remate de revés al ángulo superior del segundo palo y poner el empate a los 13 minutos.Y nueve más tarde, en una ráfaga, Argentina ampliaría diferencias: primero por intermedio de Pedro Ibarra, de penal, y luego por Rodrigo Vila, de palomita. En la segunda parte, después de resistir la presión y un par de fijos polacos, Lucas Rossi y Lucas Vila escribirían sus nombres en la planilla para poner cifras definitivas.


Pese al aplomo del grupo, la profundidad en las 23 rivales y la paciencia como bandera de fortaleza, el técnico seguramente haya tomado nota de los errores defensivos, como el que ocurrió en el gol polaco: en las instancias decisivas y contra oponentes de mayor jerarquía, se deberán reducir al mínimo las fallas no forzadas en la última línea.  

Los dirigidos por Pablo Lombi, octavos en el escalafón mundial, enfrentarán el sábado a Bélgica (12º) para acceder a la final del certamen que clasificará al equipo campeón directamente al Champions Trophy de Australia 2012.