Progresos defensivos en Australia

Nacho Bergner en la final de los Panamericanos

Atrás quedaron las mieles del oro panamericano, casi quedaron olvidados los goles de Bergner, Ibarra y Lucas Vila en el 3 a 1 ante Canadá en octubre. Londres es la parada principal en este año olímpico. Y en ese camino preparatorio, Australia y Holanda, en el marco de la Kookaburras Cup, parecían poder elevar la vara y potenciar el rendimiento argentino.  

El cuadradito 2x2 en el diario sólo dice que Argentina perdió los cuatro partidos en su gira por Oceanía. Pero no menciona, por ejemplo, los laureles de los oponentes y mucho menos algunas situaciones de los cotejos. 

Pese a la frialdad que demuestra la valla vencida, la labor defensiva se fortaleció. Contra Australia, el mejor equipo del mundo, la defensa argentina otorgó cuatro cortos (el primero a los 10' del segundo tiempo) en todo el match. Si bien los canguros exhibieron sus credenciales de números 1 del ranking al convertir dos fijos y sacar un penal de otro corto para inclinar el resultado a su favor, la cifra es una muestra de la prolijidad y concentración del conjunto de Pablo Lombi cerca del propio círculo.

"A este nivel los detalles definen los partidos", sentenció Ignacio Bergner sobre las diferencias que existen entre los equipos en desarrollo y formación como Argentina con los líderes de la FIH masculina. Aunque también destacó que "Estamos contentos de estar jugando contra los mejores del mundo y en estas canchas. El equipo esta mejor, con algunos lesionados pero casi adaptados al viaje y al cambio de horario. Jugar contra ellos es una buena manera de progresar".  

El player de San Fernando valoró el correcto desempeño defensivo así como el buen rendimiento físico ante holandeses y australianos, y manifestó que "Debemos aprovechar estos encuentros de primer nivel para pulir y tratar de imponer nuestro juego la mayor parte del tiempo posible".