“Ir a los Juegos de Singapur fue una experiencia increíble. A nivel personal fue el mejor torneo que tuve en mi vida. Fui pensando que bueno ir a los Juegos Olímpicos Juveniles pero jamás pensé que iban a tener tal magnitud. Con las chicas pensamos que la ceremonia de inauguración iba a ser muy sencilla y sobrepasó nuestras expectativas. El recibimiento también fue increíble. Uno ve los Juegos por la tele y no sabe lo que es estar ahí, cruzarse a atletas de deportes y países que uno no conoce y poder dialogar con ellos. Y ese es el espíritu olímpico. La idea de los Juegos Juveniles es empezar a entender de chicos ese espíritu", apunta Cedrés.
Y ejemplifica. “Con las holandesas de hockey fue una linda anécdota. Cuando terminó la final, y
pese a que nos habían ganado, fuimos los dos equipos a comer a Mc Donald´s y
nos pusimos a charlar. Ahí se ve el espíritu olímpico: te fomentan a relacionarte
con otros deportistas. En un mundial o en otros certámenes cada uno está por su
lado. Otro gran momento fue haber conocido a Braian Toledo, con
quien nos hicimos amigos. Cuando se hizo el Mundial de hockey de Rosario, a las
Leoncitas que viajamos a Singapur nos hicieron un reconocimiento y lo invitamos
a él porque habíamos entablado una muy buena relación".
El disfrutar del juego -algo que a veces puede perderse con el avance de la edad y con cierta profesionalización- y la unión del plantel fueron las principales claves apuntadas por Jimena Cedrés en aquella estadía asiática.
“A nivel grupal creo que fuimos un equipo muy maduro porque estábamos
nosotras solas, apenas una jefa de equipo y un solo entrenador, porque
lamentablemente el Comité Olímpico Internacional daba un cupo de personas escaso. Fueron muchos
días, Singapur es la otra punta del mundo y con apenas 17 años creo que pudimos
apoyarnos entre nosotras y rescato la madurez en ese aspecto. Si bien no éramos
muy conscientes de lo que estábamos jugando, creo que todas tuvimos un buen desempeño y en particular creo que fue mi mejor torneo. Y también destaco que
básicamente pudimos jugar, disfrutar, pudimos gozar del juego”, señaló la mediocampista.
Como en los Youth Olympic Games de Singapur (donde además de Cedrés viajaron Sol Fernández, Victoria Cabut y "Mumi" Bustos), en esta segunda edición las atletas de San Fernando serán
mayoría en la nómina albiceleste. En un plantel de apenas 9 jugadoras, la institución tricolor será la única que contará con dos players: Eugenia Trinchineti y Micaela Retegui. Además, SanFer también aportará al técnico, Agustín Corradini. La subcampeona del mundo versión Junior evalúa las ventajas del conocimiento previo entre ellos y analiza al DT.
“Corradini es re molesto. Van a ser muchos días de
convivencia y creo que va a ser clave la buena onda, y Agus es muy divertido. Les
va a dar mucha confianza y las va a apoyar para que disfruten lo que están
viviendo. Lo que resalto de él es que tiene muy en cuenta la persona por sobre
el jugador: a veces necesitamos un apoyo o unas palabras antes de entrar a
jugar, y en eso la tiene bastante clara. Cuando hablamos con Euge y Mica en el club sobre el viaje se nota que hay un buen grupo humano. Al ser tantos días juntos va
a ser importantísimo el tema de la unión y que tres integrantes se conozcan va a ser positivo. Agustín sabe distender y crear armonía en el grupo, y las chicas seguramente se prendan en esa dinámica".
La volante creativa también trajo a escena su consejo para sus dos compañeras de club: "A ambas les dije que lo disfruten apuntando a la esencia del juego, al
divertirse, porque uno a esa edad ve todo distinto y no es consciente de lo que
está viviendo.Seguramente no caigan de lo que están viviendo hasta que estén
ahí e incluso se darán cuenta cuando vuelvan. Tal vez allá decís que bueno, la
última semana; no, al contrario, les recomendé que disfruten esa última semana porque cuando vuelvan se van a querer matar".
La vuelta a las Leonas
“Estoy muy contenta con la convocatoria. Estuve varias veces
en el proceso y me costó bastante acostumbrarme y sentirme cómoda. Considero
que me faltaba madurar, pero fue un tema personal y no medió ningún factor
externo. Han pasado algunos años y pude hablar con varias personas: mi meta
ahora no es quedar en una lista, sino que es disfrutar. Si uno puede
disfrutarlo, todo llega solo. Si bien no es un buen momento, intentaré aportar
todo lo que tenga para ayudar al grupo a salir adelante, empezando por la buena
onda al momento de ir a entrenar”.
Tanto Santiago Capurro -precisamente el técnico en Singapur 2010 y actual DT de las Leonas- como Corradini dirigieron a Jimena ya sea en su etapa Junior o en San Fernando. Cedrés opina sobre ese
plus que le puede aportar la relación previa con los nuevos seleccionadores de las Leonas.
“El conocer al técnico supongo que me ayudará a la hora de
sentirme cómoda y a insertarme en el grupo. Con
Agustín tengo un mayor trato en el club, por lo que puedo tener esa
confianza de preguntarle che, Agus, qué
me falta, o capaz él me dé algún trabajo particular. Que el entrenador de mi
club sea ayudante en la Selección es algo que tengo a favor e intentaré
aprovecharlo para potenciarme”.
Foto: Dirk Markgraf.
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